Saludos queridos hermanos/as y amigos/as, hemos estado sin informar por tanto tiempo porque esta situación actual mundial ha sido como un cambio de visión sobre nuestra realidad y dinámica, todos nuestros esfuerzos han sido para atender los grandes desafíos de la Covid-19.
Además de la crisis sanitaria global, nos enfrentamos al impacto socio-económico actual que ha empujado a más de 60 millones de personas a la pobreza extrema y a la proliferación de miles de grupos en vulnerabilidad física y emocional. Como creyentes tenemos una cita con la historia, la misma pasa por proyectar y accionar un enfoque adecuado a esta realidad, poniendo en práctica valores como: solidaridad, misericordia, bondad, amor generando un impacto como nunca se ha visto en la humanidad.
Respondiendo a esta realidad hemos estado sirviendo desde varias iniciativas nacionales e internacionales como: Desarrollo y consultoría promundis (D.C.P.M), Asociación de ayuda al necesitado (A.D.A.N), Asociación Familia Solidaria, Asociaciones locales afines en cada región donde cooperamos, todos con una solo misión bendecir en forma integral a los más vulnerables.
Tenemos mucho camino a recorrer, es el tiempo de ser y hacer de nuestras vidas un reflejo incondicional de servicio.